El primer testimonio escrito data de 1.675 en la obra de Pedro Gómez de Bedoya y Paredes” Historia Universal de las Aguas Minerales de España”.
El manantial ,posiblemente por las continuas crecidas del Miño, permaneció oculto hasta 1750 que fue en esa época cuando comenzó realmente su andadura inicialmente como poza utilizada para regar el maíz que nacía abundante en la zona. Posteriormente los vecinos comenzaron a utilizarlo para bañarse de forma rudimentaria.
Fue en Septiembre de 1.882 cuando Don Antonio Oliver Rubio (Santander 1.843-Madrid 1.900) llegó por primera vez a Caldelas y descubrió las aguas “milagrosas”que estaban adquiriendo una fama considerable. Tal fue en impacto que le produjo que dos meses mas tarde volvió y comenzó la compra del manantial y los terrenos colindantes. Una vez rematados los trámites inició la construcción del Balneario en 1.885.
La primera piedra del “Gran Hotel” se colocó el 13 de Julio de 1.889. El 12 de Enero de 1.900 don Antonio fallece sin estar el hotel rematado, su viuda Doña Cruz Echazarreta lo acaba como puede y sigue el camino emprendido por su esposo. Después continúa su hijo Don Manuel Oliver y desde su fallecimiento hasta la actualidad, la sobrina de éste Doña Mª Cruz Ruiz.
El primer reconocimiento oficial como aguas mineromedicinales con declaración de utilidad pública fue 16 de Abril de 1.869 en “La Gaceta de Madrid” y posteriormente en 1.928 en el mismo boletín. Esto es a grandes rasgos los antecedentes de una empresa que ha tocado tres siglos de nuestra historia y que mantiene un valor fundamental en su trabajo, la creencia y respeto a ese don de la tierra que nos diferencia , El Agua.